jueves, 28 de noviembre de 2019

(24A) Plutarco: Parte I

HISTORIADOR, BIÓGRAFO Y FILÓSOFO MORALISTA GRIEGO
Plutarco (Πλούταρχος, Plútarjos, en latín: Plutarchus; Queronea, c. 46 o 50-Delfos, c. 120) —también conocido como Plutarco de Queronea o, tras serle concedida la ciudadanía romana, como Lucio Mestrio Plutarco (Lucius Mestrius Plutarchus, en griego: Λούκιος Μέστριος Πλούταρχος) — fue un historiador, biógrafo y filósofo moralista griego.

Nombre de nacimiento: Lucius Mestrius Plutarchus (Μέστριος Πλούταρχος)
Nombre en griego antiguo: Πλούταρχος Nacimiento: 46, Queronea (Beocia, Imperio romano)
Fallecimiento: 127, Delfos (Fócida, Imperio romano)
Nacionalidad: Romana (etnia griega)
Cónyuge: Timóxena
Hijos: Timóxena, Querón, Soclaro, Autobulo, Plutarco
Educación: Alumno de Ammoni de Lampres
Ocupación: Ensayista, sacerdote, magistrado, biógrafo, historiador, escritor y filósofo
Cargos ocupados: Embajador
Movimiento: Literatura helenística
Seudónimo: Plutarco
Géneros: Biografía, varios
Obras notables: Vidas paralelas, Moralia

Plutarco nació en Queronea (Beocia), durante el gobierno del emperador romano Claudio. Realizó muchos viajes por el mundo mediterráneo, incluyendo uno a Egipto y varios a Roma. Gracias a la capacidad económica de sus padres, Plutarco estudió filosofía, retórica y matemáticas en la Academia de Atenas sobre el año 67. Uno de sus maestros, citado a menudo en sus obras, fue Amonio.

Algunos de sus amigos fueron muy influyentes, como Quinto Sosio Seneción y Minicio Fundano, ambos importantes senadores y a los cuales dedicó algunos de sus últimos escritos. La mayor parte de su vida la pasó en Queronea, donde fue iniciado en los misterios del dios griego Apolo. Sin embargo, sus obligaciones como el mayor de los dos sacerdotes de Apolo en el Oráculo de Delfos (donde era el responsable de interpretar los augurios de la o las pitonisas del oráculo) ocupaban aparentemente una parte pequeña de su tiempo. Llevó una vida social y cívica muy activa, además de producir una gran cantidad de escritos, parte de los cuales aún existen.

Más moralista que filósofo e historiador, fue uno de los últimos grandes representantes del helenismo durante la segunda sofística, cuando ya tocaba a su fin, y uno de los grandes de la literatura helénica de todos los tiempos.

BIOGRAFÍA
Infancia y juventud
Plutarco nació un poco antes del año 50 en Queronea, una ciudad beocia de ilustre pasado para la historia de Grecia, pero que en esa época era solo una pequeña POBLACIÓN. Pertenecía a una familia acomodada de la zona y conocemos el nombre de su bisabuelo, Nicarco, porque lo cita en una de sus obras lamentando los males que para la zona trajo la guerra en la época de la batalla de Accio (Antonio, 58). También aparecen como personajes de sus diálogos su abuelo, Lamprias, que presenta como un hombre culto en las Charlas de sobremesa y que debía seguir vivo avanzada su juventud, su padre Autobulo, aficionado a la caza y los caballos, además de dos hermanos: Timón y Lamprias, este último sacerdote en Lebadea. Lamprias era además aristotélico, mientras que Plutarco era platónico. Durante sus estudios en Atenas, dirigidos por Amonio, que profesaba en la Academia, este lo encaminó a las matemáticas, aunque él prefería la ética; el título de una obra perdida de Plutarco así lo parece indicar: Amonio, o de la no convivencia voluntaria con el mal. Concluidos sus estudios, volvió a Queronea, pero la ciudad requirió sus servicios para tratar asuntos administrativos con el procónsul romano en Corinto.

Sobre el año 67 inició un viaje de estudios que lo llevó a Alejandría y a Asia Menor, donde probablemente visitó Esmirna, que en aquel entonces era un importante centro filosófico del movimiento conocido como segunda sofística

Probablemente participó en los Misterios eleusinos
MAGISTRADO Y EMBAJADOR
Además de sus deberes como sacerdote del templo de Delfos, Plutarco fue también magistrado en Queronea y representó a su pueblo en varias misiones a países extranjeros durante sus primeros años en la vida pública. Su amigo Lucio Mestrio Floro (de quien tomó su nombre romano: Lucio Mestrio Plutarco), cónsul romano, patrocinó a Plutarco para conseguir la ciudadanía romana y, de acuerdo con el historiador del siglo viii Jorge Sincelo, el emperador Trajano lo nombró, ya en la vejez del escritor, procurador de la provincia de Acaya. Este cargo le permitió portar las vestiduras y ornamentos propios de un cónsul.

Viajó por lo menos tres veces a Roma (se sabe al menos que una fue poco antes de la muerte de Vespasiano el 79 d. C.; una segunda vez hacia el año 88 y otra durante el reinado de Domiciano, antes del año 94). Allí hizo amistades en las altas esferas sociopolíticas, como el senador Julio Antíoco Filopapo (nieto del último rey de Comagene), el ya mencionado senador Lucio Mestrio Floro y Quinto Sosio Seneción, este último amigo también de Plinio el Joven y dos veces cónsul bajo el imperio de Trajano. Sosio Seneción fue además huésped de Plutarco en Grecia y a él dedicó el escritor muchas de sus obras: el opúsculo Sobre los progresos de la virtud, una parte de las Vidas paralelas y los nueve libros de las Symposiaka o Charlas de sobremesa, estas últimas puestas por escrito por petición del propio Sosio Seneción.[8]​ Pese a estos contactos políticos en el Imperio Romano, Plutarco decidió siempre vivir en la pequeña población de Queronea al igual que todos sus antepasados.

Tal vez por eso ningún escritor griego contemporáneo lo menciona. Viajó, eso sí, ocasionalmente por Grecia: el abundante material autobiográfico contenido en las Symposiaka nos indica que estuvo otra vez en Atenas, donde lo adoptaron por ciudadano honorario; en Patras, donde era recibido a su vez por Socio Seneción; en Eleusis, en Corinto, en los baños de Edepso de Eubea, hospedado por el sofista Calístrato, y en los de las Termópilas, donde se relacionó con el académico Favorino de Arlés; la noticia de la muerte de una hija suya lo alcanzó en Tanagra, desde donde escribió una Consolación a su mujer. En su ciudad natal fue telearco y arconte epónimo, tal vez Beotarca. Pero sobre todo estuvo en Delfos como sacerdote de Apolo más o menos desde el año 95 d. C. A su oráculo dedicó obras como De la sílaba "e" en el templo de Delfos, De los oráculos en verso y De la cesación de los oráculos. Como el griego le bastaba en Roma, donde la clase alta era bilingüe, no sintió la necesidad de aprender bien latín sino ya bastante viejo, cuando necesitó documentarse para sus obras históricas, "tarde ya y muy adelantado en edad", según escribió. Y no lo aprendió bien: cita pocas obras latinas, y con frecuencia no las entiende bien; entre los poetas, solo cita, y poco, a Horacio, y parece haber ignorado por completo a Virgilio y a Ovidio. 
Casado felizmente con Timóxena, tuvo de ella cuatro hijos, de los cuales solo sobrevivió uno, Autobulo. Su sobrino Sexto llegaría a ser preceptor del emperador Marco Aurelio. La enciclopedia Suda dice que el predecesor del emperador Adriano, Trajano, hizo a Plutarco procurador de Iliria, aunque muchos historiadores consideran esto como poco probable, ya que Iliria no era una provincia procuratorial, y Plutarco seguramente tampoco hablaba el idioma. Según la Crónica de Eusebio de Cesarea, refundida por San Jerónimo, vivía aún en el 120 d. C; Artemidoro, en su Onirocrítica, de cuarenta años después, escribe que poco antes de fallecer soñó que subía al cielo conducido por Hermes.

Escribió mucho. En el denominado “catálogo de Lamprias” (al parecer preparado por uno de sus hijos) se relacionan 227 títulos, de los cuales nos habrían llegado aproximadamente la mitad, divididos en dos grupos: uno misceláneo de contenido predominantemente moral, los Moralia, y otro biográfico, las Vidas paralelas.


Fuentes: Wikipedia, Afm Elierf
Grupo en Facebook

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Lo más visto